SANTIAGO. El semanario Camino consideró que la justicia actúa con benevolencia en beneficio de los delincuentes que asesinan para robarles pertenencias a ciudadanos, abandonando así a las víctimas cuando más necesitan protección y amparo.

En su editorial de la edición de este domingo titulado “Con las víctimas”, el vocero escrito del Arzobispado de esta provincia dice que “este viacrucis lo han vivido muchas familias dominicanas, sintiéndose destruidas al ver la benevolencia y el trato, casi preferencial, que se les brinda a los que cometen estos delitos”.

Precisa que quienes han pasado por la triste realidad de ver partir a destiempo a un ser querido, por culpa de un delincuente que le quita la vida para arrebatarle un celular o cualquier otro objeto, sienten impotencia al mirar al victimario en la calle, sin haber pagado el daño causado a la sociedad.

”Creemos que este mal proceder estimula la violencia y el crimen. Ya es hora de revisar el Código Procesal Penal, para evitar que los malhechores se consideren vencedores y continúen con un accionar que se convierte en una burla hacia los ofendidos”, remarca el semanario Camino.

A juicio del periódico especializado en temas religiosos, no se puede continuar brindando tanto apoyo al victimario, mientras hay familias a las cuales ellos han lastimado por siempre.

Camino dice compartir la preocupación que sobre el tema expuso hace unos días en esta ciudad el magistrado Milton Ray Guevara, presidente del Tribunal Constitucional.

Al ofrecer una conferencia con el tema “La protección de la víctima y testigos, un reto para el proceso penal”, Ray Guevara consideró que “si hay un ámbito en que quedan evidenciadas las miserias del proceso penal en la actualidad dominicana, es en la protección que corresponde garantizar a las víctimas y los testigos”, a quienes considera los grandes olvidados de la reforma Procesal Penal.

El semanario Camino tiene la esperanza de que “este olvido termine, porque si queremos tener una nueva sociedad libre de la inseguridad y la delincuencia que provocan tanto miedo y desasosiego, hay que aplicar la ley a quienes la violan. Sólo así viviremos en la paz que tanto anhelamos”.