El Sikorsky S-76B en el que han encontrado la muerte Kobe Bryant y sus acompañantes, es todo un clásico del género, la versión mejorada del modelo A y precursora del C. La versión A comenzó a fabricarse en los años 70; y la C en los 90.

Se trata de un helicóptero de tamaño medio, concebido como transporte civil y comercial. Pero sus potencialidades como aparato de uso militar, debidamente modificado y denominado Spirit, condujeron a que fuera adquirido por una decena de Fuerzas Aéreas. Entre ellas la española, que emplea el S-76C.

España posee helicópteros, también algunos de Sikorsky, en las tres ramas de sus Fuerzas Armadas. Pero el S-76C, rebautizado HE-24 en la nomenclatura propia, pertenece al Ejército del Aire, que utiliza los ocho ejemplares disponibles, asignados al Ala 78, como plataformas de entrenamiento, en la base de Armilla (Granada). En Armilla se forman todos los pilotos de helicóptero de nuestros Ejércitos y Cuerpos Armados (Guardia Civil, Policía Nacional...). La Xunta de Galicia dispone desde 2005 de dos ejemplares, asignados en su Servicio de Guardacostas. Uno con base en Vigo y otro en Vivero.

Igor Sikorsky era un ingeniero, aviador y visionario nacido en 1889 en la ucraniana Kiev, perteneciente entonces al Imperio Ruso. Emigrado a Estados Unidos en 1919, fundó la Sikorsky Aircraft Corporation en 1923. Desde entonces, con sede en Stratford (Connecticut), ha sido una de las líderes mundiales en la fabricación de helicópteros civiles y militares. Especialmente militares. Entre ellos el SH-3 Sea King, el CH-53 Sea Stallion, el SH-60 Seahawk y el celebérrimo UH-60 Blackhawk. La empresa fue adquirida en 2015 por el gigante Lockheed Martin, que la ha mantenido a la cabeza de la industria aeronáutica.

Las versiones más modernas del S-76 cuestan alrededor de 13 millones de dólares por unidad, alcanzan casi los 300 kms. por hora, tienen un techo de vuelo de 4.200 metros y un alcance de 760 kms. Disponen de dos motores y de cuatro palas en cada uno de los rotores: el principal y el de cola. Son unas aeronaves muy populares entre altos ejecutivos y personajes adinerados de todos los ámbitos. También entre jerarcas. La versión C, por ejemplo, es el helicóptero presidencial argentino y la utilizada oficialmente por la Familia Real británica.