El cantante Joaquín Sabina (71) y su pareja desde hace dos décadas, Jimena Coronado (51), se han casado este lunes en el registro civil de la calle Pradillo de Madrid, según ha confirmado José Navarro 'Berry', su representante.

A la discreta ceremonia han acudido el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y el también músico Joan Manuel Serrat, compañero de aventuras como la gira conjunta 'No hay dos sin tres', que tuvo que finalizar abruptamente el pasado 13 de febrero (día del 71º cumpleaños de Sabina), después de que el cantautor de Úbeda se cayese del escenario en plena actuación. El golpe le provocó una hemorragia cerebral de la que tuvo que ser intervenido horas después en el Hospital Ruber Internacional.

Es probable que la convalecencia de Sabina tras el accidente y la posterior paralización a causa de la Covid-19 hayan retrasado el enlace entre el músico y Coronado, ya que se conocía desde el pasado otoño que le había pedido matrimonio.

Lo desveló Serrat en una entrevista conjunta durante el tramo argentino de la gira 'No hay dos sin tres'. "Le pidió a casarse a Jimena. Se arrodilló y le regaló un anillo", dijo el autor de 'Mediterráneo'. "Eso no lo debías contar", le increpó entonces, medio en broma, Sabina. A lo que Serrat respondió: "¡Ah!, fue tan hermoso". La complicidad entre ambos quedó patente en la conversación subsiguiente. "Yo tengo 70 años, el día que la 'Jime' cumplió 50 doblé la cerviz y en verso...", empezó explicando el autor de '19 días y 500 noches'. "Llegó a arrodillarse", intervino entonces Serrat. "Y en verso... bueno, él sabe", prosiguió su amigo. "Yo el verso no me lo aprendí porque estaba llorando y no pude", se disculpó el catalán. "Él ve un pedrúsco y sabe inmediatamente lo que me había costado", remató.

Tras la ceremonia en el registro civil, se ha podido ver a los recién casados: él, vistiendo un traje azul marino y con un sombrero de paja; ella con un vestido en tonos grises azulados; y ambos, con mascarillas.