El 25 de junio de 2009, el planeta entero se paralizó con la noticia del fallecimiento de Michael Jackson, el “Rey del Pop”.
Tenía 50 años cuando padeció de un paro cardiorrespiratorio provocado por una sobredosis de propofol, administrado por su médico personal, Conrad Murray. Desde entonces, cada aniversario de su muerte se convierte en una jornada de homenajes, recuerdos y debates sobre su compleja figura.
Jackson falleció en su casa de Los Ángeles, en pleno proceso de ensayos para su regreso a los escenarios con la gira This Is It. Las entradas estaban agotadas, y millones de fanáticos esperaban con ansias el retorno del artista que marcó la historia de la música y la cultura pop del siglo XX.
Un legado artístico irrepetible
Michael Jackson no solo fue un cantante exitoso: fue una revolución. Su álbum Thriller (1982) sigue siendo el disco más vendido de todos los tiempos, con más de 66 millones de copias despachadas en todo el mundo. Obras como Bad, Dangerous y HIStory consolidaron su estatus de leyenda viva.
Cambió la historia de los videoclips con piezas como “Beat It”, “Thriller” y “Smooth Criminal”. Su influencia abarca generaciones de artistas, desde Beyoncé hasta The Weeknd, pasando por Bruno Mars, Usher y Justin Timberlake. En la danza, impuso el moonwalk como sello inmortal. En la industria musical, redefinió el marketing, las giras y el estrellato global.
En vida ganó 13 premios Grammy, vendió más de 400 millones de discos y es uno de los artistas más galardonados de la historia. También fue un filántropo activo, con donaciones millonarias y la creación de la fundación Heal the World, destinada a ayudar a niños vulnerables.
Controversias que no han cesado
Su figura, sin embargo, también arrastra polémicas que han perdurado incluso después de su muerte. Las acusaciones por abuso sexual marcaron la última etapa de su carrera, especialmente tras la emisión del documental Leaving Neverland en 2019. Pese a todo, una parte importante de sus fanáticos sigue defendiendo su inocencia y centrando el foco en su obra artística.
A 16 años de su partida, Michael Jackson sigue siendo una figura de devoción y controversia, pero por sobre todo, un ícono cultural sin comparación. Sus canciones se siguen escuchando en todo el mundo, sus pasos de baile se replican en redes sociales, y su influencia está presente en cada rincón de la música pop actual.
