El comunicador de El Sol de la Tarde, Ricardo Nieves, dijo que la sociedad está enfermando de manera “muy seria” y que no lo dice para “alarmar” a propósito del asalto al Banco Popular de la Olof Palme con Luperón el tres de junio cuyo cabecilla es el actor, modelo e instructor de tiros, Jorge Luis Estrella Arias.

Así como miembro de la Academia Procamp.

Sostuvo que no lo dice para etiquetar ni condenar a nadie.

“Pero vamos por un camino muy, muy delicado, sumamente peligro de desvalorización completa de instrumentalización de la vida, de la vida decente, de la vida civilizada, de la vida basada en ciertos modelos de honestidad”, expuso.

Indicó que la edad de tres de los jóvenes involucrados en al asalto al Banco Popular de Luperón es de 24, 25 y 26 no así la de Jorge Luis Estrella Arias que de 26 años, quien se entregó este viernes en Punta Cana tras estar prófugo.

Indicó que los tres jóvenes son generación 4% de la educación.

El comunicador, abogado, médico y docente expresó que hay que sentirse apenado por el caso.

Reflexión por otro lado que se ven personas involucradas en los Calamar y Medusa que no tienen necesidad de implicarse en eso que no tienen necesidad material y económica y no son carenciados.

Ricardo Nieves expresó que cuál es el modelo de sociedad que impera y qué escala de valores impera en nuestro país.

Señaló que ese modelo de éxito que se ha vendido y ha prendido en la conciencia de muchos jóvenes apunta al fracaso personal muchas veces.

Indicó que en el país hay cámaras hasta en los colmados por lo que incluso desde hace dos días siguieron rastreando el vehículo en que transitan los asaltantes del Banco Popular.

Manifestó que se integran las cámaras privadas con las 911.

Expresó que no son criminales y profesionales del delito ni delincuentes pulidos especializados sino tipos con arrojos y cierta personalidad, psociopática cuya escala de valores radica en que otro me vea bien, que poseo y ostento.

Indicó que vivimos una etapa del capitalismo pop “muy espinosa” donde la apariencia suplanta a veces la esencia y realidad.

“Y hay gente que pierde la vida, se expone, sucumbe por aparentar, tener, poseer, poder, hacer”, acotó.

El comentarista dijo que eso hay que trabajarlo en la casa y en la escuela.

Sostuvo que no se podía evitar que esos jóvenes se dedicaran a eso del asalto porque era inevitable que no podía prever ni evitar nadie en el mundo.

Destacó que lo único que podía frenar eso es una pared o frentera ética que haga mejor ser humano que es de lo que carecemos.

Enfatizó que en esta etapa los valores de bondad, decencia, honestidad, del buen hacer y del buen obrar no se promueven sino la basura que estamos cosechando.