Oportuna ofensiva en un quinto episodio en el que anotaron un racimo de cuatro carreras que incluyó dos jonrones y una buena labor monticular de dos lanzadores que recetaron 14 ponches con sólo cinco imparables tolerados, le dieron la victoria a los Cerveceros de Milwaukee 7-3 sobre los Marlins para llevarse la serie 2-1, el domingo en el LoanDepot de Miami.

Los visitantes fueron los primeros en pisar la goma en la primera entrada ante el abridor de los Marlins Elieser Hernández por pasaporte a Kolten Wong, error de Brian Anderson en batazo de Christian Yelich y elevado de sacrificio al bosque central de Luis Urrías.

Los Marlins se fueron arriba 2-1 en la parte baja de la segunda frente al derecho Brandon Woodruff por error del antesalista Mike Brosseau en batazo de Avisail García, doblete de Brian Anderson, pasaporte a Erick González que llenó las bases y sencillo al derecho de Payton Henry.

En el tercer acto los Marlins sumaron una carrera cuando el cubano Jorge Soler botó la bola por la banda izquierda (su séptimo jonrón de la temporada) que puso la pizarra 3-1.

Abriendo el quinto episodio los Cerveceros se fueron arriba anotando un racimo de cuatro por jonrones consecutivos de Jace Peterson y Kolten Wong. Un error de Miguel Cabrera en batazo de Brosseau y un pasaporte a Yelich decretó la expulsión de la lomita de Hernández. A su rescate llegó Louis Head que dominóa a Urías, pero Rowdy Tellez remolcó la tercera de la entrada con sencillo al izquierdo y Omar Narvaez dio otro cohete al derecho para ubicar la pizarra 5-3.

Milwaukee agregó una carrera en la séptima por cuadrangular de Tellez frente al relevista Tommy Nance. Y en la octava sumaron otra por sencillos de Wong, Brosseau y Urías.

En este partido el primer bate de Milwaukee Kolten Wong tuvo una tarde perfecta al embasarse en las cinco ocasiones que estuvo en el plato; una por jonrón, la otra por sencillo y tres por pasaportes.

En la lomita de los Cerveceros el derecho Brandon Woodruff trabajó cinco episodios donde aceptó tres carreras (una limpia), cinco imparables, ponchó a seis bateadores y regaló dos pasaportes para llevarse la victoria (4-2-5.35). El zurdo Aaron Ashby relevó a Woodruff en la sexta y retiró a trece bateadores con ocho de ellos por los ponches. El revés lo sufrió Elieser Hernández (2-3-6.15).

Los Marlins siguen con su calendario en casa para los próximos seis partidos. A partir de este lunes se medirán a los Nacionales de Washington en una serie de tres juegos (6:40 p.m.). Después jugarán otros tres partidos ante los Bravos de Atlanta.

Cuando miramos la tabla de posiciones vemos que los Marlins después de sufrir ocho derrotas en los últimos 11 juegos se encuentran en el cuarto lugar de la División Este de la Liga Nacional.

Su pitcheo colectivo es uno de los mejores de todo el circuito con 3.46 de carreras limpias (#5), un WHIP de 1.20 (#4) y un promedio aceptado ante los bateadores rivales de .223 (#3), sobresaliendo en lo individual el venezolano Pablo López que encabeza la liga en efectividad con 1.05, un WHIP de 0.81 (#3), 46 ponches en 43 entradas y cuatro victorias con una derrota.

Pero el bateo, en especial la producción de carreras es el más grave problema del equipo. Los hombres de fuerza con la responsabilidad de llevar anotaciones hacia el plato siguen con un bajo rendimiento.

El cubano Jorge Soler adquirido desde los Bravos de Atlanta tiene promedio de .188, con siete jonrones (con el de este domingo) y 16 impulsadas. El dominicano Jesús Sánchez batea para .207 con sólo tres cuadrangulares y 12 remolques. El venezolano Avisail García tiene dos batazos de cuatro esquinas y siete impulsadas. Garrett Cooper promedia .255 con dos jonrones y 12 fletadas.

La ofensiva colectiva promedia .236 con embasamiento de .310 para ocupar el octavo lugar de la liga, pero sus 141 carreras anotadas con 133 impulsadas ubica a Miami en el puesto 12 entre los 15 equipos de la Liga Nacional. Y es aquí donde se necesita una mayor consistencia.

En lo individual su mejor bateador ha sido el intermedista Jazz Chisholm con promedio de .288, embasamiento de .327, seis jonrones, 24 impulsadas, slugging de .577 y OPS de .904.

La temporada es joven y pudiera ocurrir esa reacción positiva a la ofensiva. Aspecto necesario en las aspiraciones de los Marlins para avanzar a la postemporada.