Un día del verano pasado, Harrison Barnes, un veterano de la NBA, estaba terminando un entrenamiento de pretemporada con Victor Wembanyama, su compañero de equipo en los Spurs de San Antonio, de 2,24 metros de estatura y en ese entonces de 20 años, y una de las estrellas jóvenes más deslumbrantes de la liga. Barnes comenzaba a entender que Wembanyama era precoz en más de un sentido.

En la NBA, muchos equipos hacen un seguimiento de los porcentajes de tiro y de los tiros acertados en los partidos y en los entrenamientos, como una manera de medir el progreso de sus jugadores. Los Spurs tenían una tabla que registraba ambas cosas, pero clasificaba a los jugadores en función de los tiros exitosos. Barnes le dijo a Wembanyama que esa métrica le parecía insuficiente. Wembanyama reflexionó sobre la preocupación de Barnes. Luego cogió un rotulador y esbozó algunas ideas en una pizarra.

"Realmente intentaba entender y responder la pregunta de ‘¿cómo se mejora en ese aspecto?’”. dijo Barnes. "¿Cómo se traza lo que es el progreso?".

Aquel día, Barnes vio en la psique de Wembanyama la sincera búsqueda de conocimiento y conexión humana que ha llevado consigo durante la primera parte de su carrera en la NBA. Eso conduce al tipo de autenticidad que los vendedores ansían y por la que se sienten atraídos los aficionados.

Wembanyama llegó a la NBA procedente de Francia como la promesa más publicitada desde LeBron James. Fue elegido primero en el draft de 2023, y su juego en la cancha ha estado a la altura de las expectativas iniciales. Puede manejar el balón como alguien que mide 30 cm menos. Puede hacer volcadas y lanzar triples, lo que ha generado debates sobre qué debería hacer más. Es quizás el defensor más temible de la liga, con una envergadura de 2,5 metros casi infranqueable.

Mientras la NBA se enfrenta a su futuro sin un James veterano y sin sus contemporáneos Stephen Curry y Kevin Durant, Wembanyama ha abrazado la idea de que liderará la liga, con su juego y sus esfuerzos fuera de la cancha. Y ha aprendido que la mejor forma de presentarse es simplemente ser quien es, una persona intensamente enfocada en ser un gran jugador de baloncesto, a quien también le gusta leer novelas de fantasía, jugar ajedrez y acumular todo el conocimiento que pueda sobre el mundo.

“La mayoría de nosotros queremos crear un buen legado y una buena imagen, porque esas son las cosas que la gente recordará", declaró Wembanyama, que cumplió 21 años este mes, en una entrevista reciente. “Pero, por otro lado, creo que la mejor forma de tener la mejor imagen y de transmitir los mensajes adecuados que quiero enviar es ser auténtico. Es decir, no forzarme a hacer cosas que no se parezcan a mí o a decir cosas en las que no creo”.

"No tengo prisa, pero tomo decisiones estratégicas", afirmó Wembanyama. "Y no dudo en rechazar ofertas de millones y millones de dólares simplemente porque provengan de cosas en las que no creo".

Wembanyama fue el novato del año de la liga la temporada pasada y su líder en bloqueos por partido. Esta temporada, se convirtió en el primer jugador de la historia de la NBA en conseguir más de 2000 puntos, 1000 rebotes y 200 triples en sus 100 primeros partidos. Es el favorito en las apuestas para ser el jugador defensivo del año de la liga, un honor que rara vez se concede tan pronto en la carrera de un jugador.

Wembanyama anotó 50 puntos contra los Wizards de Washington en noviembre, su primer partido de 50 puntos y apenas el octavo partido de 50 puntos individuales en la historia de los Spurs. Tras el partido, restó importancia a lo que había hecho, diciendo que esperaba que fuera simplemente uno de los muchos logros de su carrera.

Wembanyama sabe que al final se le juzgará por el número de campeonatos que gane, lo cual le parece bien.

"Tiene ambiciones mayores", aseguro Barnes. “Le motiva ganar. Quiere ser uno de esos tipos que van y ganan una medalla de oro olímpica, que van y ganan un campeonato de la NBA, esas son las cosas que realmente le motivan”.

Wembanyama ha aumentado espectacularmente la popularidad de los Spurs en Francia, y su camiseta es el segundo uniforme de la NBA más vendido en Europa, por detrás de la de James. Es el tercer jugador de la liga más visto en las redes sociales en todo el mundo, sólo por detrás de James y Curry. Después de que sus Bucks de Milwaukee jugaran contra los Spurs este mes, el griego Giannis Antetokounmpo dijo que Wembanyama "será una cara de la liga durante muchos años".

Motivaciones mayores

En 2022, una empresa emergente de bebidas deportivas llamada Barcode empezó a trazar un plan para asociarse con Wembanyama.

Barcode fue fundada en 2020 por Bar Malik, que había trabajado con equipos y jugadores de la NBA, y Kyle Kuzma, alero de los Wizards de Washington que luego jugó en los Lakers de Los Ángeles. Uno de los principales inversores de Barcode era un empresario llamado Karim Maachi, que mantenía una estrecha relación con los agentes de Wembanyama.

Wembanyama dijo que confiaba en sus agentes, Bouna Ndiaye y Jeremy Medjana, fundadores de la agencia Comsport, y en su agente de mercadeo, Issa Mboh, jefe de mercadeo global de Comsport, para filtrar las ofertas.

"En los negocios, mi objetivo con quien me asocio no es el dinero", afirmó Wembanyama. "La motivación es más bien crear un ecosistema de cosas con las que pueda identificarme y crear un legado de cosas que quiero dejar tras de mí".

Confía en que lo conocen lo suficiente como para elegir las oportunidades adecuadas. Antes de que entrara en la NBA, sus agentes pasaron meses entrevistando a docenas de amigos y familiares de Wembanyama para asegurarse de que tenían una idea clara de quién era como persona.

"Queremos que siga siendo francés", dijo Ndiaye. "Porque algunos de los jugadores internacionales van a Estados Unidos y se americanizan. Y también queremos que adopte la cultura estadounidense porque vive en EE.UU. Vivirá allí quizá toda su vida".

Wembanyama tiene actualmente acuerdos con Nike y la marca francesa de moda de lujo Louis Vuitton, que le ayudan a resolver el problema de encontrar ropa para alguien tan alto y delgado. También trabaja con la cadena de supermercados H-E-B de San Antonio, la empresa de mercancía deportiva Fanatics y el videojuego NBA2K, todas ellas marcas con un largo historial de relaciones con estrellas.

Barcode no era ese tipo de empresa. Ahora es la bebida deportiva oficial de los Spurs, los Nets de Brooklyn y los Heat de Miami, pero en ese entonces era una empresa emergente sin historial. Maachi sabía que eso podía ser una desventaja cuando abordó por primera vez con Malik la idea de contactar a Wembanyama.

"Tenemos un 1 por ciento de posibilidades de conseguirlo", dijo Maachi a Malik.

Pero ¿por qué no intentarlo?

Tras pasar el filtro de los agentes, Malik le hizo una presentación a Wembanyama a través de una videollamada en noviembre de 2022.

"Realmente conectó conmigo", afirmó Wembanyama.

Unos meses después, Malik y Wembanyama se reunieron en una cafetería de París. Pidió participaciones en la empresa y ahora tiene la segunda mayor participación junto a Malik. También es la cara de la marca. El éxito del fichaje de Wembanyama hizo a Maachi pensar en “Air. La historia detrás del logo”, la película sobre cómo Nike fichó a Michael Jordan.

En la sala de conferencias de Milwaukee, Wembanyama fue informado de la comparación de Maachi.

"Es gracioso", dijo Wembanyama. "Espero poder tener el mismo tipo de impacto. Por supuesto".

La asociación entre Nike y Jordan fue transformadora para ambos, ya que Jordan se convirtió en el mejor jugador de todos los tiempos.

¿Es ese el objetivo de Wembanyama? El francés dudó.

“A ver”, dijo, y luego dudó unos segundos más.

"Soy una persona supersticiosa", afirmó. "No hablo de mis... no digo mis objetivos en voz alta".

Wembanyama sonrió tímidamente y señaló que era una buena forma de responder a esta pregunta, una que seguramente le volverán a hacer.