Estrógeno alto: alertas médicas ante un desequilibrio cada vez más común
Estrógeno/RCC Noticias
Las alteraciones hormonales suelen pasar desapercibidas hasta que comienzan a afectar la calidad de vida. El estrógeno, una hormona clave en el cuerpo femenino, es esencial desde la pubertad hasta la adultez; sin embargo, cuando sus niveles se elevan por encima de lo normal, pueden aparecer señales físicas, emocionales y riesgos silenciosos para la salud.
Especialistas de la Cleveland Clinic advierten que factores cotidianos como el estrés, el estilo de vida y la exposición a sustancias químicas del entorno influyen en este desequilibrio, que hoy afecta a un número creciente de mujeres y también a hombres.
El rol del estrógeno y qué ocurre cuando está elevado
El estrógeno regula el ciclo menstrual y la fertilidad, y cumple funciones importantes en la salud ósea, cardiovascular y cerebral. Cuando existe un exceso, puede desencadenar irregularidades menstruales, molestias físicas y aumentar la predisposición a enfermedades ginecológicas.
Los expertos explican que este desequilibrio puede responder tanto a cambios naturales del organismo como a factores externos, entre ellos medicamentos hormonales y hábitos de vida poco saludables. En casos donde el estrógeno predomina sobre la progesterona, se presenta la llamada dominancia estrogénica, asociada a un crecimiento excesivo del endometrio y mayor riesgo de tumores.
¿A quiénes afecta el estrógeno alto?
En las mujeres, el estrógeno elevado suele relacionarse con el uso de anticonceptivos orales, terapias hormonales, el síndrome de ovario poliquístico (SOP) y etapas previas a la menopausia. Tras la menopausia, la obesidad y el sobrepeso se convierten en factores clave.
Aunque en menor proporción, los hombres también pueden verse afectados. En ellos, el exceso de estrógeno puede provocar infertilidad, disfunción sexual y desarrollo de tejido mamario, conocido como ginecomastia. Según la Cleveland Clinic, ningún desequilibrio hormonal debe ignorarse, aun cuando los síntomas sean leves.
Síntomas más frecuentes del estrógeno elevado
Uno de los principales retos es que los síntomas suelen ser inespecíficos y confundirse con estrés u otros trastornos. Entre los más comunes se encuentran:
- Períodos menstruales irregulares o más abundantes
- Sensibilidad o aumento del tejido mamario
- Aumento de peso en caderas y muslos
- Cambios de humor, cansancio y problemas de concentración
- Disminución del deseo sexual
- Dolores de cabeza y caída del cabello
- Dificultad para concebir en mujeres y hombres
Principales causas del estrógeno alto
Las causas varían según la etapa de vida y las condiciones individuales. Entre las más frecuentes figuran la producción excesiva de estrógeno, el uso prolongado de anticonceptivos o terapias hormonales y alteraciones hepáticas que dificultan su eliminación.
La grasa corporal también influye, ya que el tejido adiposo produce estrógeno. A esto se suman el estrés crónico, el consumo elevado de alcohol y la exposición a xenoestrógenos, sustancias presentes en plásticos, pesticidas y cosméticos, consideradas disruptores endocrinos.
Cómo se diagnostica y trata el estrógeno elevado
El diagnóstico se realiza mediante análisis de sangre que miden estrona, estradiol y estriol. La evaluación y el tratamiento deben estar a cargo de especialistas, como ginecólogos o endocrinólogos.
El abordaje suele ser personalizado e incluye cambios en el estilo de vida: reducción de peso, manejo del estrés, dieta rica en fibra, menor consumo de alcohol y evitar envases plásticos. En algunos casos, se requiere ajustar tratamientos hormonales o recurrir a medicamentos que reducen la producción de estrógeno.
Importancia del seguimiento médico
El control del estrógeno alto requiere constancia, cambios sostenidos en los hábitos y supervisión médica regular. Los especialistas de la Cleveland Clinic subrayan que una detección temprana y un manejo adecuado permiten prevenir complicaciones y proteger la salud integral.
El estrógeno es una hormona esencial, pero su exceso no debe subestimarse y requiere atención oportuna.
Fuente: Infobae.
